jueves, 21 de noviembre de 2013

ACARÍCIAME

Antes de terminar de leerlo, sabía que este poema es de Tagore. Destila una belleza que endulza de serenidad mis instantes. Una maravilla.

Vengo a Ti para que me acaricies
antes de comenzar el día.
Que tus ojos se posen
un momento sobre mis ojos.
Que acuda a mi trabajo sabiendo
que me acompañas, Amigo mío.
¡Pon tu música en mí
mientras atravieso el desierto del ruido!
Que el destello de tu Amor
bese las cumbres de mis pensamientos
y se detenga en el valle de la vida,
donde madura la cosecha.

Rabindranath Tagore

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡¡¡Que relajación de poema!!! y sentirse acariciado por el Amigo Jesús, te da una paz... que vas " aviao pa mucho tiempo". Gracias César por compartirlo.