viernes, 26 de marzo de 2010

PRECIOSA ORACIÓN

En el libro "Creer, ¿para qué? Conversaciones con alejados" de José Antonio Pagola encuentro está bellísima oración que me llega muy dentro y que comparto con vosotros.

Ven, pastor.
Deja las noventa y nueve
y busca la oveja que se ha perdido…
Búscame, encuéntrame, acógeme, llévame…
Tú puedes encontrar al que buscas,
tomarlo en brazos
y llevártelo contigo.


AMBROSIO
Obispo de Milán (340-397)

jueves, 25 de marzo de 2010

CONFESARSE ES COMO IR AL DENTISTA




Pues sí. Llevamos dos días en los pueblitos a vueltas con la celebración cuaresmal de la Reconciliación y ¡uf!, ¡qué complicado! la gente vive la confesión como si se tratara de ir el dentista: una vez al año y obligados, como si uno tuviera un flemón.
Se ponen las personas como cuando estás en la sala de espera del dentista: nervioso y aterrorizado, pasas las hojas de "Hola" y "Semana" sin ver nada, se te va poniendo el cuello duro como una piedra, cuando la enfermera te llama sientes una oleada de angustia por el estómago, entras, ves la mesa de tortu... de operaciones y... uuufff.... ya pasó... hasta el próximo flemón, o hasta el año que viene por pascua florida ("confesar los pecados mortales al menos una vez al año...").
Cómo nos hemos cargado la Reconciliación. La hemos reducido al hecho mecánico y material de "decir los pecados", que es justo lo que más le cuesta al personal. Pero originalmente es una experiencia mucho más profunda, más auténtica, es un momento de sinceridad ante Dios, de hacer consciente la distancia que hay entre nuestra fragilidad y su amor irrevocable e incondicional, que tiene el poder de reverdecer lo que en nosotros está seco, de resucitar lo muerto, de reconstruir nuestro corazón derrumbado...
Eso no se improvisa, no se hace en cinco minutos, ni todas las semanas; eso hay que prepararlo con una buena revisión de la propia vida, y un rato sereno delante de Dios, para abrirle nuestra verdad, con sinceridad, no para que nos vea nadie ni para cumplir ninguna norma, sino para crecer como personas, como seguidores de Jesús. Preparar el momento de la Reconciliación es más importante que el momento mismo, como en un iceberg es mucho más grande lo que está sumergido que la punta.
Y luego, crear un clima agradable, de confianza, de libertad. Empeñémonos en seguir obligando a la gente a decir con precisión tooodos los pecados; emperrémonos en querer controlar las conciencias de las personas, en exigirles confesiones que "legitimen" la comunión; sigamos cargando sobre el cumpli-miento del precepto pascual, que seguiremos encontrando confesiones mecánicas, rutinarias, "de la señorita pepis" ("yo lo mismo de siempre", "yo es que no tengo ningún pecado", "no mato, no robo..."), de sota-caballo-rey... y no quedará piedra sobre piedra de la preciosa experiencia personal que es la Reconciliación
Pero tendremos lo que nos merecemos. Seguirá siendo algo tan obligatorio y tan desagradable como ir el dentista... aunque sin revistas mientras esperamos.

jueves, 18 de marzo de 2010

ATRAÍDAS POR JESÚS EN MEDIO DE LA PROSTITUCIÓN


Me han enviado desde la red "Buenas Noticias" este texto de José Antonio Pagola; no creo que le importe que os lo ofrezca aquí. Un abrazo!


Soy José Antonio Pagola. De manera excepcional, os envío por esta Red el testimonio de mujeres que ejercen la prostitución. Es realmente una buena noticia. Son mujeres que están tomando parte en grupos donde, acompañadas por las Hermanas Oblatas, reflexionan y oran con la ayuda de mi libro Jesús. Aproximación histórica. He quedado conmovido al captar la fuerza y el atractivo que tiene Jesús para estas mujeres de alma sencilla y corazón bueno. ¿No nos volvería a repetir Jesús aquello que gritó en Galilea: «Las prostitutas entran antes que vosotros en el Reino de Dios»?
Un abrazo grande y agradecido a vosotras mujeres creyentes, por vuestro testimonio, y a vosotras, hermanas Oblatas, que compartís con ellas vuestra fe. José Antonio.

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- Me sentía sucia, vacía y poca cosa, todo el mundo me usaba. Ahora, me siento con ganas de seguir viviendo porque Dios sabe mucho de mi sufrimiento.
-Dios esta dentro de mí. Dios está dentro de mí. Dios está dentro de mí. ¡Este Jesús me entiende…!
- He experimentado la presencia de Dios en un viaje a Europa, mi compañera murió en el camino. Dios estaba cerca, lo sentí a mi lado. En aquella mañana sentí que la mano de Dios me guió y su presencia fue muy fuerte…
- Ahora, cuando llego a casa después del trabajo, me lavo con agua muy caliente para arrancar de mi piel la suciedad y después le rezo a este Jesús porque él sí me entiende y sabe mucho de mi sufrimiento.
- Jesús quiero cambiar de vida, guíame porque tú solo conoces mi futuro…
- ¿Donde estabas? Cada día que pasa siento más el amor de Dios y me siento acariciada por las personas que Dios pone en mi camino…
- Para mí, el simple hecho de sentir amor en el corazón es prueba de tener a Dios en el corazón…
- Me siento afortunada de haber conocido a este Jesús…
- Yo pido a Jesús todo el día que me aparte de este modo de vida. Siempre que me ocurre algo, yo le llamo y Él me ayuda. Él esta cerca de mí, es maravilloso…
- Él me lleva en sus manos, Él me carga, siento la presencia de Él…
- En la madrugada es cuando más hablo con Él. Él me escucha mejor porque en este horario la gente duerme. Él está aquí, no duerme. Él siempre está aquí. A puerta cerrada, me arrodillo y le pido que merezca su ayuda, que me perdone, que yo lucharé por Él.
- Mi vida en el pasado era un vacío, un vaso quebrado, le coloqué un corazón y se unieron los trozos…
- Un día yo estaba apoyada en la plaza y dije: Oh Dios mío, ¿será que yo sólo sirvo para esto? ¿Solo para la prostitución?... Entonces es el momento en que más sentí a Dios cargándome ¿entendiste? Transformándome. Fue en aquel momento. Tanto que yo no me olvido. ¿Entendiste?...
- Yo ahora dialogo con Jesús y le digo: aquí estoy, acompáñame. Tú viste lo que le sucedió a mi compañera (se refiere a una colega que fue asesinada en un hotel). Te ruego por ella y pido que nada malo suceda a mis compañeras, yo no hablo pero pido por ellas pues ellas son personas como yo.
- Ahora, cuando tengo tiempo, voy a su capilla hecha de troncos cortados por la mitad y de palmas. Se llama la iglesia de la naturaleza. Tienen una capilla para la adoración. Y me encuentro conmigo misma… y no digo “Señor dame esto o aquello” estoy sin hacer nada. Solo a veces canto mi canción favorita «anima Christi» especialmente porque es mi favorita. Yo le canto a Jesús en mis pensamientos.
- Solo en Jesús puedo confiar… a través de mis lágrimas y orando para sobrevivir.
- Estoy furiosa, confundida, triste, dolida, rechazada, nadie me quiere, no sé ni a quien culpar o sería mejor odiar a la gente y a mí, o al mundo. Fíjate, desde que era niña yo creí en ti y has permitido que esto me pasara. Ya estoy cansada de echar la culpa a Dios. Pero no me hagas daño. Te doy otra oportunidad para protegerme ahora. Bien, yo te perdono, pero por favor no me dejes de nuevo.
- En Jesús he encontrado el verdadero amor que he deseado conocer y experimentar.

lunes, 15 de marzo de 2010

SOY, SOY SOY SOY, SOY SOY SOY, SOY SOY SOYYYYYYYYY


Aquí se puede ver al cura de jovenes junto a otros ejemplares de su misma especie aberronchándose contra el rocaje vivo en el encuentro diocesano del sábado pasado. Sí, fue estupendo. Claro que hay cosas que revisar, que mejorar... claro que uno no está de acuerdo con todo... ¡Pero fue una gozada!
Me sentí el mismo de siempre; sobre todo al principio, con la camiseta puesta paqueteramente encima del jersey, le di las gracias al buen Padre por ser quien soy, porque no he dejado de serlo y a la vez soy muy diferente... Tantos encuentros, tantas convivencias, bailes y chorradas... fue como cerrar un círculo. Ésta es mi diócesis, mi iglesia. Éste es mi lugar, y aquí presto mi servicio, doy una mano para que los jóvenes tengan vida. Es mi vocación, siempre lo ha sido, y es irrevocable. Es mi vida expresada en una camiseta: SOY cura de jóvenes. ¡Vaya suertaza!
Gracias a mis compañeros de la Delegación por aceptarme, por enriquecerme... Perdonad si a veces soy tajante en mis apreciaciones, o parezco muy radical en mis convencimientos. Gracias a la JEC por acompañarme en desaprender cosas y aprender otras, estamos en ello. Gracias a mis salesianos por tanto bagaje, tantísimas horas de vuelo... Gracias a Juan Román por confiar en este desconocido.
"Por la gracia de Dios soy lo que soy". Síiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

PAGOLA


Este lunes me he levantado agotao, o con astenia primaveral o lo que sea... El caso es que hoy no funciono, no tiro de mi cuerpo y llevo toda la mañana leyendo diferentes cosas: esa es la ventaja que tiene amanecer fundido y abocado al dique seco.

Los útimos días es tema corriente de conversación la retirada del famoso libro de J. A. Pagola sobre Jesús (la portada está aquí a la derecha). Miro hace 5 minutos y encuentro en internet esto:
Vaaaya. Pero es que un rato antes, sumergido en la apasionante lectura del folleto de González Faus "Miedo a Jesús" (lo recomiendo, http://www.fespinal.com/espinal/llib/es163.pdf) veo lo siguiente:

(...) la institución eclesial parece muy dispuesta a responder a la cuestión de quién era Jesús, con palabras como «Dios de Dios, Luz de Luz... consustancial al Padre», que figuran en el credo cristiano aunque sean más límites negativos de la fe, puestos contra los arrianos de hace 17 siglos, que no expresiones positivas de nuestra fe hoy. Pero la institución eclesial se marea siempre que alguien trata de responder a la otra pregunta: ¿cómo era ese Jesús a quien la Iglesia confiesa como Dios de Dios y Luz de Luz? Prefiere “imaginarlo” ella desde su propia idea de Dios, a pedir ayuda a la historia y a las ciencias para que, en la pequeña medida de lo posible, la acerquen a Jesús. Se recae así en un procedimiento que ya denuncié hace 30 años: en lugar de argüir: «Jesús era así –es así que Jesús era consustancial al Padre– luego ¡Dios es así!»... se prefiere argumentar de este otro modo: «Dios es así –es así que Jesús era Dios– luego Jesús tenía que ser así». De este modo el Dios revelado en Jesús se nos vuelve digerible y ya no se verifica aquello que anunció D. Bonhoeffer: que ese Dios pone del revés todo lo que el hombre religioso (¡y las instituciones religiosas!) esperan de Dios."
¡Gracias maestro! Coincido humildemente contigo y, desde luego, yo no se expresarlo con más exactitud. Perdón por la extensión pero no puedo dejar de poner esto otro:

"Lo quieran o no lo quieran todos esos que creen estar con Dios precisamente porque no están con los últimos: éstos son el primer lugar teológico. Y si algo necesita urgentemente la Iglesia de Dios no son doctores en derecho canónico (que tampoco hacen demasiada falta), ni siquiera doctores en teología (por mucha falta que hagan), sino aquellos que podríamos llamar “doctores en pauperología”. Un doctorado que no conceden las universidades romanas ni extranjeras."
Gracias J. A. Pagola por tu libro, que ayuda a comprender muy bien por qué Jesús es Dios... aunque algunos le tengan miedo.

lunes, 8 de marzo de 2010

SALIR "POR NÁ" Y VOLVER CON HUEVOS


Después de pasar un fin de semana estupendo en el Encuentro General del Movimiento Rural Cristiano, tengo muchas ganas de escribir sobre ello para seguir dando en las narices a quienes dicen "de memoria" que la acción católica está espachurrá... Pero me voy a contener para no ser cansino y voy a contar solamente lo de los huevos, que es de hace un cuarto de hora, fresquito, una doceeeena...
Ser cura de pueblo consiste en salir "pa ná", es decir, salir "a ver gente" sin ningún motivo especial, simplemente por preguntar al personal cómo está, por hacerse uno el encontradizo, medir si el brillo de estos ojos está hoy más apagado o sencillamente decir "hola".
Esta mañana salí así y vi a mi alcaldesa (se me olvidó felicitarla porque hoy es el día de la mujer ... trabajadora, ¿hay alguna que no lo sea?), luego me gusta asomar la gaita por la tienda de Poli, que o mismo te rellena la bonoloto que te vende un cuarto kilo de jamón york; y paso por casa de Enrique saludo a su madre, Maxi, en la cama muy mayor (¡hoy sí se acordaba de quién sy yo y no me confundía con el praticante); luego le ha tocado a Saturnino y Agustina, y más tarde a su vecino Perico. Resulta que a Perico ¡le han quitado hoy una catarata!, qué puntería mireusté. Me dejo atrás a Anita, que hoy en el piso titulado estaba mu mala; hacia ella iba cuando salió ulián, muy nervioso, tengo el vientre malo, padre, voy a dir al médico y no encuentro la cartilla -no pasa nada, le digo, se lleva el DNI y le atienden igual. Casi no me escuchaba pero yo sentía que mi mano en el hombro sí le servía.
Sitio especialmente agradable para decir hola es el estanco, donde siempre hay gente, donde me invitan a una café y donde está María Luisa, que es una persona con quien merece la pena echar un rato. Ser cura de pueblo consiste en buena medida en estar, en mezclarse con la gente sin pretender nada concreto, ni "ayudarles" ni "que vengan a misa", solamente compartir lo de todos los días, salir a ver qué aprendo hoy, qué recibo, cómo me hacen crecer, cómo me enriquecen sin siquiera sospecharlo.
Agustina, la mujer de Saturnino, me había dicho: "cuando vaya de vuelta de Perico, pase". Pasé y me esperaba una docena de huevos de campo, bien frescos, gordos y bonitos. Los huevos son la expresión material del bien que cada día me hacen mis vecinos. Voy a ver si frío un par de ellos y me los jinco.

sábado, 6 de marzo de 2010

"ESPACHURRADOS..."


Sé que mi amigo y compañero Pepe Moreno Losada no se enfadará si copio en mi blog la última entrada del suyo; como estábamos sentados uno al lado del otro en aquella ponencia, lo suscribo palabra por palabra y no creo que se pueda expresar mejor. ¡Gracias, Pepe!


“Atribulados en todo, mas no aplastados; perplejos, más no desesperados; perseguidos, más no abandonados; derribados, mas no aniquilados” (II Cor 4,7ss).


Acabo de llegar de un encuentro interdiocesano que es un congreso para sacerdotes de la provincia eclesiática de Mérida – Badajoz, con el lema “El sacerdocio, un reto nuevo para tiempos nuevos”. Y la verdad que no salgo de mi asombro en lo que se refiere a un detalle. Por la tarde ha habido una ponencia titulada “Vivir el ministerio en una parroquia renovada”, la ha dictado el vicedecano de Derecho Canónico en la Universidad de Salamanca, como experto en derecho parroquial.
Se trata de un sacerdote de los operarios, que estudió derecho canónico por que se lo mandaron según confesó, pero que se ha dado cuenta de la importancia del mismo. Para él una parroquia renovada es la que tiene una buena “gobernanza” y para eso miraba realidades seculares y políticas como referencia. De la conexión Iglesia- mundo, o parroquia evangelizadora y misionera no ha dicho nada. Se podían hacer preguntas y yo, inocente de mí, le pregunté por escrito y sin derecho a réplica, acerca de la relación parroquia – mundo y ambientes seculares, y en qué medida los movimientos de acción católica podían ser un instrumento para esa conexión.
El canonista, con aires apocalípticos – no conocía yo esta dimensión del derecho – ha proclamado que la acción católica “está espachurrada… ya no queda nada…” y que hay que ser eficaces. Que vale el método de acción católica pero que es algo que nació, hizo su cometido y ahora le toca morir. Me pregunto que pensará de los propios operarios que son “poquitos”, de mi seminario que hace tres años que no ingresa ningún candidato, de las parroquias que están en cuadros,etc. Él no está en parroquias, sólo va a celebrar la “Eucaristía” a una de la ciudad los sábados, con una comunidad neocatecumenal, según nos ha contado, y son los que el domingo animan la misa de la parroquia, con lo cual están muy integrados, y además tienen fuerzas para ir de puerta en puerta. También puso un ejemplo aleccionador de un fiel cristiano, del opus, que en Roma había ganado un veredicto favorable frente a su obispo y su párroco para ser confirmado con doce años, porque ya estaba preparado.
Yo que según podéis ver en el post anterior vengo de un encuentro de juventud estudiante católica de una vitalidad sorprendente e ilusionante este fin de semana último – soy consiliaro general de este movimiento y antes lo he sido de profesionales-, me ha dolido la sentencia de muerte que ya tiene firmada el canonista, que además afirmaba que el derecho canónico solo ordena lo que existe y no inventa… YO que conozco la Hoac, la JOc, el movimiento rural, la Jec, la Frater, la Acción católica general recién reformada, me sorprende la ligereza de la sentencia y la poca delicadeza con todos los que están en esos ámbitos dando la vida y creyendo en lo de la levadura y el grano de mostaza. Sólo hay que ver las revistas que generan estos movimientos y que son de las pocas, en algún caso únicas, que tratan de la vida en el mundo y de ambientes concretos en los que la Iglesia se quiere hacer significativa: mundo obrero, rural, estudiantil, salud, barrios, universidad, profesiones, política.
Ayer mismo me llegaba un correo electrónico de una persona que ante un escrito mío sobre un hecho profesional y su lectura creyente en el grupo de revisión de vida, me pedía acompañamiento y compartir lo que tuviéramos los profesionales cristianos; ella tiene una responsabilidad de cierto rango en una autonomía de España y necesita luz para iluminar su caminar profesional y político, yo le ofrecí lo del movimiento de profesionales, sus materiales en la web y le puse en contacto con otras personas cristianas que se mueven en su ambiente y con las que hago estudio del evangelio.
Ni que decir tiene que prefiero hacer caso a la vida, a esta persona concreta que buscaba acompañamiento, que a las sentencias que este conferenciante por su cuenta, sin conocimiento de la realidad, ha dictado delante de centenares de sacerdotes, haciendo proclamas apocalípticas de la muerte de la Acción Católica, alguien susurró detrás de mí que era un cadáver. Yo me acordé de Lázaro- también era un cadáver- y del cuerpo muerto de Jesús en la cruz… “espachurrado”.. y esta noche rezo, unido a todos los militantes de la acción católica general y especializada, con la carta a los corintios: “LLevamos este tesoro en recipientes de barro para que aparezca que una fuerza tan extraordinaria es de Dios y no de nosotros. Atribulados en todo, mas no aplastados; perplejos, más no desesperados; perseguidos, más no abandonados; derribados, mas no aniquilados”… “espachurrados pero no muertos,al menos por ahora”
A mí estos movimientos me están dando vida y esperanza y por lo que yo vea a mucha gente dentro de la iglesia y del mundo. Y Me pregunto: ¿Cuando aceptaremos lo de las minorías significativas como un elemento evangelizdor en medio de esta sociedad secularizada?