domingo, 24 de septiembre de 2023

"INVEROSIMILIDADES"


Estas semanas en España he visto algunas cosas que me han producido estupor hasta el punto de plantearme si serían ciertas, o bien obra de la inteligencia artificial. Aunque hay por todas partes emanaciones de la estupidez humana, eso también.

O de la codicia o la maldad, claro, que son primas. Me llegó una información dando cuenta de la proliferación alarmante de la minería ilegal en los ríos de la Amazonía peruana norte – región Loreto. Esta actividad conlleva a la deforestación de bosques primarios y también afecta a los principales ríos, generando una peligrosa contaminación debido al uso de sustancias como el mercurio y otros metales pesados en la extracción del oro. En nuestro Napo sabemos que el nivel de mercurio en el agua es al menos 5 veces mayor que los estándares de la OMS.

Al rato de leer aquello me encuentro con una entrevista en video con este titular: “Ser ‘youtuber’ es un trabajo muy desgastante que tienes que hacer día sí y día también”. Vaya por Dios. No creo que sea como la tarea de los chaucheros de Iquitos, que pueden conocer también en video acá. A veces veo cargadores ya mayores acarreando tremendos fardos gradas arriba y gradas abajo … no sé cómo pueden. Pero no queda otra, hay que salir día sí y día también a ganarse el pan.

Me ha impactado a full el asunto de los seguros de mascotas; y no me refiero tanto a la cobertura de responsabilidad civil, que me parece bien (cuando era niño me mordió el perro de un turista y hubo que ir a buscarlo en un coche Z de la policía municipal a ver si estaba vacunado), sino a otras prestaciones de tipo médico: asistencia veterinaria, “estancia en residencia por hospitalización del asegurado”, consultorio telefónico…

En la región Loreto apenas hay un médico por cada 10.000 habitantes, y la asistencia sanitaria, lejos de estar asegurada, es muy deficiente o directamente inexistente cuando nos adentramos en lo profundo de la selva. La cantidad de perros y gatos es incontable, muchísimos sin dueño… Recuerdo infinidad de perros esqueléticos, sarnosos, hambrientos, enfermos.

Volvamos al agua: veo más dispensadores en las casas, parece que cada vez más gente no quiere beber el agua del grifo, y hay empresas que se encargan de abastecer: “nunca te quedarás sin agua. Te la llevamos a casa para que, con este dispensador que te cedemos gratis, te sirvas un vaso bien frío siempre que quieras”. Qué majos.

Pero ¡el agua de la red pública suele ser de gran calidad! No se valora el hecho cotidiano de abrir la llave y que salga agua al toque, agua potable, limpia, tan accesible… Pienso en la gente que vive junto a quebradas que se secan en la época de vaciante y tiene que caminar hasta encontrar un caño para lavar, para bañarse y para consumir. Pero lo más dramático es que en el mundo nos estamos quedando sin agua a marchas forzadas, y creo que no somos conscientes.

¿Y qué puedo decir de la aparición de la inteligencia artificial (IA)? Un grupo de chivolos en un pueblo cerca de mi casa han agarrado una herramienta simple de IA, han compuesto imágenes de 30 compañeras de instituto desnudas bajando fotos de sus rostros de tiktok (creo), y las han zampado a las redes sociales. Toma castaña. Todos son menores de edad, y algunos tienen menos de 14 años.

No hay forma de distinguir la realidad de la creación, pueden hacernos tragar ficciones y engañarnos impunemente. Me pregunto cuánto tiempo llevan haciéndolo… Pero esta foto no está manipulada: ¿será el único coro del mundo en el que absolutamente toditos tocan la guitarra? Son de la parroquia de Fuentes de León (Badajoz), cuya generosidad me dejó también estupefacto. Y eso merece una entrada completa, próximamente.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No se donde vamos a llegar, los empobrecidos cada vez más pobre y aquí cada vez más preocupados por el tener que por el ser. Un abrazo