miércoles, 22 de abril de 2015
UNA NUEVA FASE
Se ha marchado Ángel y me ha dejado un montón de herencias: la habitación, el despacho, su cáliz y su patena, un chubasquero de dos piezas, gente que viene a pedir apoyo, el número de gotas de lejía que hay que echarle al agua... Y al mismo tiempo noto un vacío; y un cosquilleo, porque comienza otra fase de mi vida en Perú.
Ha sido extraño asistir al final de un tiempo largo dedicado a la misión cuando me encuentro apenas empezando. Como ver el final desde el principio. Es raro pero también estimulante y esclarecedor de muchas cosas. En las palabras de estos días, en los gestos, en esas lágrimas, se aprende lo que los misioneros somos para estas gentes. Ha habido momentos en los que sentía que me iba a explotar el corazón de emoción. Recuerdo sobre todo a Miss Amelia: "Jamás podremos agradecer al Señor lo que los sacerdotes han hecho en nuestras vidas".
Se ha ido el maestro y el discípulo se ha quedado con dos palmos de narices. ¿A quién le pregunto yo las cosas? De repente, por sorpresa a pesar de que llevo casi siete (!!) meses en una especie de provisionalidad por momentos pesada, resulta que ahora "soy yo". Se acabaron las pruebas, las presentaciones y los ensayos, me toca responder como uno más. He de seguir descubriendo, enterándome, conociendo, adaptándome... pero ya no está mi guía y mentor.
En fin, que habrá que conjugar el verbo apañarse, acudir a mis otros compañeros y darse algún coscorrón que otro más. Por eso anoche, cuando veía pasar el desfile de la fiesta de las antorchas del colegio Toribio, pensaba que es preciso muchas veces caminar en la penumbra, con una luz modesta y confiando en que la bondad de Dios nos envuelve en su protección y nos orienta con su suavidad. El "dejarse llevar" sube de pantalla y desde ahora requerirá de mí más confianza en que Diosito siempre está a mi lado.
¿Muy serio esto? Pues es lo que me ha salido hoy. Mañana, a un confín del quinto pimiento, o sea, la montaña de Zarumilla.
¿Cómo que ya no está tu guía y mentor?. Aunque se venga Angel Maya, el principal que es el de arriba seguirá estando contigo. Seguro que lo harás muy bien. Un beso.
ResponderEliminar¿Cómo que ya no está tu guía y mentor?. Aunque se venga Angel Maya, el principal que es el de arriba seguirá estando contigo. Seguro que lo harás muy bien. Un beso.
ResponderEliminarCésar,el Padre Angel te ha abierto el camino,pero Tú con tu valía y tu buen hacer podrás continuar la misión que Dios te ha encomendado.Mucho ánimo.Rezamos por ti y por todos los Misioneros.
ResponderEliminarAbrazos.